Huerto urbano III

La historia de unas batavias, unos canónigos, unas cebollitas y unas fresas:

1 de Enero:

Enero

1 de Febrero:

Febrero

1 de Marzo:

Marzo

1 de Abril:

4.1 Abril

1 de Mayo:

5.1 Mayo

Como puede comprobarse a estas alturas de la película, comenzó la cosecha de las lechugas y los canónigos, que dieron para buenas ensaladas. También, poco a poco, a medida que la cocina lo requería, cayeron las cebollas. Las fresas, al sufrir un cambio de ubicación la cajonera en pos de lograr una mejor iluminación en invierno, fueron trasplantadas (aun a riesgo de perderse) a unas macetas de tamaño mediano que aparecerán en la siguiente fotografía. Aquí termina la historia, pero comienza otra: la de unos tomates cherry, unos pimientos del padrón y otras lechugas batavia…y quién sabe si de alguna cosilla más. Se verá en las siguientes cuatro fotografías, que cerrarán esta presentación.TheNewBeginning

1 de Junio:

6.1 Junio

1 de Julio:

7.1 Julio

1 de Agosto:

8.1 Agosto

1 de Septiembre:

9.1 Septiembre

9 meses, lo que dura un embarazo. Como conclusión unas cuántas reflexiones pensando, sobre todo, en el rendimiento:

Para invierno, lo suyo es sembrar lechugas batavias, que aquí en el sur o se crían con frío o no se crían, y entremezcladas, algunas cebollas, que pueden recolectarse frescas. Las lechugas, personalmente, me han dado buen resultado. Las fresas, que inicialmente comenzaron en la cajonera, fueron trasplantadas a macetas, donde están dando un buen rendimiento. Incluso están echando hijos que pueden sembrarse en otros tiestos y así obtener nuevas matas. Albahaca, hierbabuena y otros tipos de plantas aromáticas pueden sembrarse también en tiestos para optimizar el espacio de la cajonera. Pero es positivo que, por ejemplo, la albahaca esté cerca de las tomateras pues actúa como insecticida natural.

Para primavera y verano, lo suyo serían unas tomateras cherry y alguna de otro tipo y los pimientos del padrón. La realidad es que llevamos un par de años algo negativos para el cultivo del tomate, en general, posiblemente debido a la climatología desfavorable para este cultivo: lluvias tardías y verano muy caluroso. Los pimientos prometían más, pero al ser del padrón, que unos pican y otros no, resulta que nos han tocado todos los picantes juntos en las cuatro matas que tenemos.

Eso sí, muy aconsejable es remover superficialmente la tierra de forma periódica para que respire. También, debido a que la tierra acaba por agotarse, renovar parte de ella mezclándola con una tierra rica en abono natural, si es posible, cuando vaya a cambiarse de plantas.

«El pesimista se queja del viento; el optimista espera que cambie; el realista ajusta las velas».

William George Ward

«Todas las cosas nos son ajenas; sólo el tiempo es nuestro».

Séneca