Escrito por el brasileño Júlio César de Mello Souza (Malba Tahan), «El hombre que calculaba» es un relato al estilo de las mil y una noche, pero llena de acertijos y juegos matemáticos.
Leído ya algunas veces, suelo utilizarlo como lectura en algunas de mis clases de matemáticas, pues es un buen libro de aventuras, matemáticas y creo que también sirve para potenciar la multiculturalidad y el respeto entre las personas de distintos lugares de procedencia.
Personalmente lo recomiendo a todos los que tienen una mente inquieta y juguetona. Y como dice el autor en las primeras líneas: «Y también a todos los que estudian, enseñan o admiran la prodigiosa ciencia de las medidas, de las funciones, de los movimientos y de las fuerzas».